Elogio de lo Raro, por Pedro Casariego H.-Vaquero

Lo raro es aquello que se distingue de lo demás, y cuando se ve acompañado de virtudes poderosas provoca una tensión creadora que pone en marcha el Universo.
Lo raro produce desasosiego, porque exige la comprensión de algo inusual y nos hace sentir vulgares. Nos saca de nuestras casillas.
La cima de lo raro se pierde entre las nubes.
Lo raro siempre está en el envez de las cosas.
Lo raro es la metáfora que disloca el razonamiento y llega siempre antes.
Para lo raro se reservan espacios cerrados, muy difíciles de invadir.
Es raro aquel que se mueve con fatalidad en el ámbito de lo raro.

Yo tuve un hijo raro.
Sus virtudes poderosas, honestidad, estoicismo, austeridad, clarividencia, nos sirvieron de ejemplo y marcaron a fuego a la familia, que se hizo mejor.
También nos produjo desasosiego.
Fue poeta, pintor y hombre entero.
Estaba entre las nubes y veía las cosas desde lo virtual.
Sus metáforas llevaban directamente al punto de destino.
Su espacio no coincidió con el de los demás, lo que le hizo sufrir extraordinariamente, y decidió cambiarlo por otro más sereno.
Su ausencia es inabordable.

Verano de 2002

dedicado a Pedro Casariego Córdoba por su padre.