
Los chicos de Alea Blanca (¡Tomás, no recuerdo tu apellido!), liderados por un Javier Montoro con licencia para insultar, dieron martillazos con un martillo de juguete de la feria a quien quisieron y llamaron más espontáneos al grito de "¿quién más va a torturarnos ahora?". Me reí lo más grande. Si queréis insultar poetas con impunidad, venid a la próxima en el pub La Percha, Granada. Es realmente catártico. Y gané, por mi participación, un coche de juguete chulísimo. Tarha, el elefante de juguete con rueditas tendrá que esperar a cuando te asomes tú a la próxima. ;)
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